Atendiendo a su situación y sus características podemos agrupar los siete núcleos en dos partes bien definidas, poblaciones del somontano y poblaciones del norte de la sierra, habiendo uno que situado en la solana de la sierra, sirve de unión entre ambas pues comparte características de los dos.

Situados al sur del territorio en terrenos del somontano, sobre terrenos relativamente llanos, bien comunicados y que han mantenido la población, así como las actividades económicas tradicionales: agricultura y ganadería, están:

Arascués, se encuentra sobre un llano a los pies de la corona que lleva su nombre. Arquitectura a base de tapial de arcilla, con zócalo de sillar de arenisca. Iglesia con origen románico rehecha después de la guerra.

Nueno, emplazado en una ladera cerca del río Isuela, la arquitectura se adapta al relieve con un par de pasadizos, situando las eras y pajares en la parte alta donde más corría el viento. Iglesia con cabecera del siglo XII y la torre del estilo mudéjar del XVI.

Sabayés, situado en un zona llana pero en el borde de un talud. Población de estructura defensiva por su ubicación y por la existencia de tres casas-puente que cerraban la plaza y los restos de una torre. La iglesia de origen románico es mayoritariamente del siglo XVI, destaca el alicatado interior con vistosos azulejos.

Al norte de la sierra, en valles paralelos a esta, con la población muy reducida y abandono de la agricultura y la ganadería. Los materiales de las construcciones cambian totalmente, pasando a muros de mampuestos y tejados de losa. En esta zona encontramos:

Belsué, enclavado en una elevación que domina el pequeño valle; las eras y bordas se encuentran en la parte inferior. Destaca la iglesia románica con arquillos ciegos de tipo lombardo como decoración en la torre, al igual que la cercana pardina de Santa María; el altar mayor se encuentra bajo la torre campanario.

Lúsera, situado de forma semejante al anterior, en un rellano de la solana, evitando así la mayor umbría y humedad del fondo de valle. La iglesia del siglo XVII, con la rectoral y el cementerio, destaca por su situación junto al precipicio sobre el que se asienta la población.

Nocito, se encuentra en el centro del amplio valle del Guatizalema, partido en dos barrios por el citado río y rodeado de campos de cultivo, fue la población más importante de toda la zona. La iglesia tiene su portada fechada en 1850.